Carta a Ana

Ana aunque tu apellido castellanizado, de un gran guerrero, que puso las huestes castellanas en jaque, que paseose su cabeza cortada para que los demás, tomaran ejemplo de " o se someten o te hacemos lo mismo " en claro ejemplo de aterrorizar, hoy aquellos mismos descendientes, rasgándose vestiduras, condenan el terrorismo, cuando ya hace 600 años ya ellos lo practicaban.

Querida aunque eres pariente de aquel " chusma" que en aquella sociedad significaba " los que van por delante" como linea de contención, aunque en tu ADN de mitocondria, correrá más de un 70% de esa raza corre por tus venas, sinceramente el otro 30% ya por genética, pues tienes las características físicas de aquellos terroristas invasores pequeña, menuda, no superas el 1.60 cm, me gustaría que ese 70% se impusiera.

Pero ya las malas artes las traes en la genética, capaz de reunir en tus prestaciones, de serié.

Hoy te toca lamentar porque ves que no vas a estar presente en el reino de los reinos, algo lejos para alguien que proviene de " chusmas " pero que el reino de reino por servicios a la corona te colocó como oligarquía canaria, aunque para los canarios de hecho y de ser no perteneces si no a esa parte, no menos importante de primera línea.

Pero no puedes quejarte, siempre has renegado de tu raza a pesar de, tus aires de grandeza por parte de aquellos antepasados tuyos y también de ti te llevan a tirar piedras sobre tu propio tejado. Y tirar teniques y peneques sobre tu tejado acaba rompiendo el techo y se te cae la casa.

Hoy cual plañidera, del siglo XVII o XVIII andas, llorando off de récord de lo mal que se te presenta el panorama, tienes la impresión de que no vas a estar en la corte y la corte a pesar de tus servicios, prestados de generación en generación a la corona no te tiene en cuenta, capaz entre otras atrocidades de acabar con la cabaña ganadera en Tenerife, para practicar, la muelle- sometimiento en nuestra población, causando gran desasosiego en nuestra población, para actuar en tu beneficio y enriquecimiento.

En fin Ana a cada cochino, le llega su San Martín y no se puede estar 600 años tirando bolotes, teniques y que el pueblo esa "chusma" a la cual perteneces y la cual despierta y lógicamente ya no engañas y como dicen y decimos en nuestra tierra " a llorar al cementerio o a la marea".

Los escritos de alguien especial.

Es significativo y aunque nos separan exactamente 35 años y 11 meses, nos unen la genética.

Admiro, tu capacidad de invención, como estructuras, las historias las haces, interconectar una y otras algo que me gusta y me encanta, no olvidas tu zona de confort.

Relacionas con nombres y personalidades, tus vivencias e imaginación.

Sigue adelante, la perfección se consigue creando y escribiendo, llegaras a perfeccionar la técnica, la base y esa hemorragia de imaginación ya la tienes, no lo olvides. Y aunque a veces pasa más a menudo de lo que imaginas, en blanco, te animó a que te hagas prodigar en tu cualidad y don.

Las críticas tienes que tomarlas, como  malas, hay que ver la parte positiva en las oscuridades, en las lagunas y en el pensamiento. Sentarse solo en un descampado y oír los sonidos del entorno, el viento en los arboles, sobretodo en los pinos me hacen pensar.

Si yo fuera hablar o escribir lo que tu escribes, no me veo capaz, sería muy tenebroso, muy oscuro y es que mi alma esta muy dolorida y dañada.

Sólo te aconsejó una cosa, preparate  para que tu alma se cubra de nubarrones, como padre, no lo deseó, pero la realidad es otra.

¡ Si soy canario ! ¿ y que ?

Si, me siento orgulloso de ser, Canario, soy canario por que tuve la enorme suerte de nacer aquí, donde las prisas no hay, donde se hace lo que se puede, donde valoramos una comida con nuestra, gente, más felices que una babosa en invierno y lloviendo.

Si soy canario, y me asombró de que en país en apenas, 7446.95 km2, tengo de todos los paraísos que quiero.

Lo mismo estoy viendo en Timanfaya hoy como la energías  geotérmicas siguen vivas, que mañana estoy en el Pinar Bimbache viendo la plenitud del los alisios al máximo apogeo.

Soy capaz de llorar, por ver un juego del palo, oír una chakara y oír el sonido del tambor.

Asombrarme con la jurria, que con tanto mimó trata a sus cabras y no dejan atrás una.

Soy feliz con ese mar azul inmenso que golpea en los rebosos dejando una estela blanca, cuando rompe.

Me emociono cuando llegó, a poblados de nuestros ancestros. Querría saber más de su organización social.

Me emociono en una malagueña, cuando se acuerdan de nuestros antepasados que ya no están.

Me da rabia e impotencia, que como un mercado de mercaderes, valga la redundancia se haya mal vendido esta tierra.
Me da rabia que seamos libertadores en otros países y en nuestra casa nos dejamos mangonear por todo bulto sospechoso.

Es un lujo, pasear por morro jable, sus playas con tus pies descalzos, es un lujo subir a Roque Nublo, es un lujo estar en Garajonay, es un lujo, estar en Masca, es un lujo estar simplemente en cualquier punto de mi país.

Es de satisfacción absoluta, que prepares un gofio escaldado y todo el mundo coma del mismo lebrillo, con la carne o el pescado asándose a la brasa, lentamente.

Con un buen vino de cualquier punto de este país.

Admiro, la destreza de nuestros antes, al adaptarse al terreno, no el terreno adaptarlo a ell@s.

La Geria en Lanzarote, o los canteros o llanos de paredes de piedras es un ejemplo. El calabazo para aprovechar los desniveles del agua es otro y así cientos.

Y esa es la grandeza de esta tierra y sus gentes, gentes hechas desde la miseria, desde las hambrunas, desde las vicisitudes que tienen los tiempos.

Se me enseño, a ser solidario, a dar cobijo al viajero, ayudar a los desamparados, se me enseño a confiar y el trato de tu a tu, sin ninguna superioridad, aquel que no viene con humildad ya empieza a perder nuestra confianza.

Se me enseño, a confiar en la palabra dada, no cumplir tu palabra era un deshonor.

Se me enseñó a respetar al mayor, se me enseñó a proteger al menor, se me enseñó a no faltarle el respeto a nadie. También se me enseñó a ser socarrón, a no ser abusador.

Una traición, es imperdonable.

Todo este conjunto de cosas me hace orgulloso de ser, simplemente lo que soy soy canario.