En cierta manera comprendo que la burguesía canaria, no la élite la que esta un escalón más abajo, tenga inquietudes independentistas.
La burguesía o nuevos ricos no quiere mantenerse, en el peldaño de la gran oligarquía canaria.
Ve como la situación del estado cambia a pasos agigantados, ayer el referéndum sobre la independencia de Catalunya, hoy el lehendakari que quiere cambiar la constitución, para que los pueblos pidan la autodeterminación.
Mañana llegará nuestro turno.
Aquí el handicap es un poco más, dificultoso, pues la gran oligarquía canaria, a tratado por todos los medios, hacernos externos-dependientes. Vamos unos yonkis de los muelles.
Esa burguesía ve que la situación va a cambiar, se ve, se palpa y se siente.
Esa burguesía hoy ha recibido con gran esperanza del discurso de Íñigo Urkullu, el lehendakari, pues mientras estos procesos ven la luz ellos intentaran convencer al canario que son una opción seria y contratada.
Las burguesías como norma general, quiere mantener su estatus.
Aprovechando líneas de pensamiento, de la independencia aprovechan, para meter su cuña.
Aquí el que no corre tumba al de alante.
Viendo la situación, las diferentes fichas que se moveran en los sucesivos dias es para al menos estar alerta.
El problema canario es muy complejo, muy peliagudo, de juego de tronos sin tener ninguno.
En si es entorpecer las ansias del canario por la libertad.
Ya no solo lucha con el invasor, sino también los que hacen el juego al invasor, sino que los propios independentistas quieren su cota de poder sin tenerla.
lunes, 14 de abril de 2014
A vueltas con la burguesía.
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