martes, 22 de abril de 2014

Una realidad palpable

Ahul. Esto va camino de dramatismo puro y duro. 
Sólo me hago una pregunta, supuestamente nuestra descendencia es lo más importante de nuestra vida ¿que coño le vamos a dejar? Ni derechos sociales ni estabilidad, ni recursos, ni nada. 
Seguimos preocupandonos de nuestro Super ego, si me critican, si esto o lo otro mientras nos maman la vida. 
No solo eso nos maman la herencia de nuestros hijos.
Cuando ya hemos quedado como el culo ante nuestros antepasados, perdiendo lo que a ellos tanto les costó.
Nos preocupamos del perrito, pero del futuro de nuestros hijos, ni se nos ha pasado por la cabeza.
No entiendo esta pasividad y este conformismo. Cómo buenos egoístas ¡el que venga atrás que toque si quiere! Pues no es así, hoy una ley mañana otra y la casa sin barrer.
Independientemente de las ideas políticas, nos están comiendo vivos y nosotros en un continuo ¡viva la virgen!.
Que bonito, luego queremos que nuestra prole nos respete, que coño nos van a respetar.
Lo que si pueden nos matan para eliminar bultos sospechosos o parásitos del sistema.
Mientras sigamos en esta texitura con un paro alarmante, con indigencia energéticas, mientras sigamos siendo aspirantes a las migajas del pastel, no reclamaremos nada sino que seremos unas bestias de servicio.
¿Y ese es el futuro que le queremos dejar a nuestra descendencia? Creo que estamos equivocadisimos.
Somos más lo único es salir y luchar en cada protesta social que se haga. Si los acorralamos bajaran y cederán, seguro. Ahora sigamos con nuestro ego y nuestros animalitos o luchemos por darle un futuro mejor a nuestros hijos.

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