martes, 28 de marzo de 2017

Soy la peor persona.

Soy la peor persona, para pedir tiempo, soy en estos casos intransigente.
¿ Porque ? Pues por una cuestión precisamente de tiempo, cuanto más avanza el tiempo más veo posibilidades, en que el abanico se abre, veo las posibilidades y realmente veo lo que no había visto.

Yo tengo seguro tomada una decisión, segura y firmé que jamás retrocederá, en breve si se me dice, se me explica y se intenta acercar posturas, probablemente, ceda pero si avanza el tiempo, como las morenas en el callado, me enrroco. Amigo y para salir de ahí, ni muerto.

Es una cuestión de dignidad, aunque el orgullo ayuda, pero tranquilo en la balanza pesa más, la primera que la segunda.

Muchos muertos dejé en el camino, tengo por norma general, no acceder a pruebas de fuerzas, vulgarmente conocidas como chulerías, nunca pero son personas que me producen despreció, además a pesar de ser en un momento de mi vida importante, casi imprescindibles, pasan del 100 al 0 en nada, busco todos los fallos, por muy insignificantes que en su momento fueran, en ese momento, se vuelven como montañas, inexpugnables. De hecho en esta semana paso un caso con una persona, que hace 9 años que no está en mi vida, me contaron una cosa y yo le dije a mi interlocutor, jamás le hubiera hecho yo eso. Ya ves como, todo se paga. Solo es cuestión de esperar.

Y es que la naturaleza me doto de una virtud, la paciencia y soy fiel reflejo del refrán " Siéntate a la puerta de tu casa y verás el cadáver de tu enemigo pasar "

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