Cómo conocido, cómo amigo, no tengo precio. No es que lo diga yo, lo dicen otr@s de mí.
Si puedo te echo una mano, sino tienes te doy, si me pides, eres mi conocido o amigos o familia, lo doy incluso sin yo quedarme sin nada.
Pero, si me conoces hay algo que no soporto que menosprecies, no menospreció a nadie.
Hace una semana, una persona a la cual conozco, estábamos comunicándonos, vía WhatsApp y yo estaba pidiendo una serie de explicaciones, como conozco a esta persona y utilizó para quitarse alguien, la misma palabra, está persona ya me lo había dicho y un simple chao desató el tiburón Mako que llevo dentro.
Busqué hasta, el último detalle que esta persona, había hecho y dicho, delante de mí y ataque despiadada-mente.
Lo curioso es que ya me había visto actuar en otras ocasiones y la forma, sanguinaria y dando donde más duele, sin ningún tipo de reparó.
El error es el decirme ¡ bah ! Despreciarme, para mi intolerable. Me da igual no recuperar, la amistad, de entrada, yo eso desprecios no se lo hago a nadie menos a un amigo. Pero como otras veces, cometió un error de cálculo, pero esta vez dio con el enemigo equivocado.
Me cebe, no dije ni una mentira y desde la primera, letra hasta la última, ni me arrepiento, ni me echo hacia atrás.
Clarito, sota, caballo y rey, lo que en un momento me contó en otro tiempo, como una bordadora, fui uniendo los hilos, cosí con tal precisión, como un trabajo chino. Y la verdad que me alegro, no por maldad, no por hacer daño, sino por la verdad.
Bajo mi punto de vista nunca de lo que había contado, como una cosa normal, no me había cuadrado, aunque por la relación personal que teníamos lo deje pasar.
Pero tengo un defecto, no me olvido de nada, para bien y para mal. No es la primera persona con la que me ensañó, no. Lo peor es que esta persona, pensaba que tenía una seguridad de que yo hacia ella, no la iría a utilizar.
Grave error. No me conoce a pesar de que regularmente andamos juntos. Mi estado de nerviosismo, no es normal, no me gusta que me engañen, me tengan haciendo perder el tiempo, entre otras cosas y como demostré, con excusas sin ningún peso.
Lo más que estoy, sacando en claro en esta etapa nueva de mi vida, que nada tiene que ver con lo anterior, es que en un mes, he redactado o adjuntado letras, veinte escritos, lo cual me hace, crear, soltar rabia y hacer esto de ajuntar letras que me motiva. Y aparte me encanta.
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